La disminución de las temperaturas, el incremento de la humedad y el fortalecimiento de los recursos han contribuido a una mejora en la situación de los incendios en Castilla y León, donde hay 16 incendios clasificados como de gravedad 1 y 2. La atención se centra en Porto (Zamora), en el Parque Natural del Lago de Sanabria y en la parte norte de León. El incendio en Zamora, que comenzó debido a un rayo, se ha extendido hacia las provincias de Ourense y León y se desplaza por la zona alta del parque. Los contrafuegos y la maquinaria pesada han logrado que, durante la noche, las llamas no alcancen las áreas urbanas de los doce pueblos evacuados. Los habitantes de Doney de la Requejada, uno de los doce pueblos evacuados, pueden regresar a sus hogares ahora que ha cesado el riesgo de este fuego. A media tarde de ayer, un cambio en la dirección del viento complicó la situación. Los esfuerzos se han concentrado en los cañones de la Forcadura y del Tera, así como en la Sierra de San Justo, con el objetivo de utilizar fuego técnico para prevenir que el fuego alcance Vigo de Sanabria. Los demás incendios en Zamora, ubicados en Molezuelas de la Carballeda, Puercas, Castromil y Mahíde, están avanzando. Solo el primero se mantiene en nivel 1, mientras que Puercas y Mahíde han descendido a nivel cero y este último ya está controlado.
