Nueva Delhi. Este lunes, Muhammad Yunus, el líder del Gobierno interino de Bangladés, declaró que su nación no espera reunir más recursos internos para hacer frente a la crisis de los refugiados rohinyá, justo cuando se cumplen ocho años desde que comenzó la campaña militar en Birmania que provocó un éxodo de esta comunidad musulmana. «No anticipamos la capacidad de movilizar más recursos internos debido a los desafíos que enfrentamos», afirmó Yunus en un discurso durante una reunión sobre la situación de los rohinyás, que se lleva a cabo en Cox’s Bazar, donde se ubica el campamento de refugiados de este grupo en Bangladesh. Más de 700,000 integrantes de esta minoría, a quienes Birmania no reconoce como ciudadanos, se refugiaron en esa región de Bangladés tras el inicio de una campaña de hostigamiento por parte del Ejército birmano el 25 de agosto de 2017, la cual fue catalogada por la ONU como una «limpieza étnica». «En los últimos ocho años, la población de Bangladés, especialmente la comunidad receptora en Cox’s Bazar, ha realizado sacrificios.»
Bangladés dice que ha agotado sus recursos para afrontar la crisis de refugiados rohinyás
