El presidente ruso, Vladímir Putin, logró suavizar su aislamiento de tres años y medio debido a la guerra en Ucrania durante su visita a Pekín. Los acuerdos alcanzados en su viaje parecen favorecer a China. La prensa rusa e internacional celebró un acuerdo preliminar entre Moscú y Pekín para la construcción de un nuevo gasoducto que conectará a ambas naciones. Este documento sorprendió a los especialistas, pero el Kremlin no pudo superar otros desafíos, especialmente ahora que las transacciones comerciales con China han disminuido por primera vez en muchos años.
Putin reduce aún más su aislamiento pero los acuerdos benefician más a China que a Rusia
