Este miércoles, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, adoptó una postura hacia Israel al sugerir la suspensión del acuerdo de asociación entre la UE y este país. Además, hizo un llamado a la cohesión de su mayoría proeuropea, instando a no sucumbir a las divisiones y la inacción. Von der Leyen mencionó la crisis en Gaza y afirmó que, debido al «bloqueo» que enfrenta la UE para actuar, Bruselas presentará «un conjunto de medidas para delinear un camino a seguir». Entre las medidas, mencionó la posible suspensión de apoyo bilateral a Israel, asegurando que la colaboración entre la UE y la sociedad civil israelí, así como con Yad Vashem, permanece. También se establecerá un grupo de donantes para Palestina, que contará con una herramienta para la reconstrucción de Gaza. La situación en Gaza ha afectado la conciencia global. La hambruna no debe ser utilizada como un medio de guerra. La asistencia proporcionada por la UE a Gaza supera la de otros contribuyentes. Sin embargo, es claro que Europa debe aumentar sus esfuerzos. Von der Leyen afirmó que los eventos en Gaza han «impactado la conciencia global» y enfatizó que «la hambruna causada por humanos no puede ser utilizada como un arma de guerra». Expresó que lo que sucede en Oriente Medio «es parte de un cambio en los últimos meses que resulta inaceptable», mencionando «la presión sobre la Autoridad Palestina», «los proyectos para un asentamiento en la zona E1, que separaría la Cisjordania ocupada de Jerusalén Este» y «las acciones y comentarios de los ministros del Gobierno israelí, que fomentan la violencia».
