El excomisario José Villarejo está siendo juzgado por quinta vez en la Audiencia Nacional, en relación al caso número 8, denominado Marbella, que involucra un informe sobre el empresario Felipe Gómez Zotano, en un conflicto económico con una mujer relacionado con un tema inmobiliario. La Fiscalía Anticorrupción solicita una pena de 9 años de prisión por cohecho pasivo y revelación de secretos por parte de un funcionario público. La Sala de Apelación de la Audiencia Nacional aceptó parcialmente el recurso presentado por Villarejo contra su primera condena relacionada con tres partes del caso Tándem, resultando en una reducción de su pena de 19 a 13 años de prisión, al absolverlo del cargo de falsedad documental. La Sala también decidió absolverlo del cargo de cohecho pasivo, ya que consideró que las tareas que realizó como líder de su empresa, Cenyt, no estaban relacionadas con su función como policía. En el documento de acusación relacionado con el caso que se va a juzgar, los fiscales solicitaban una pena de 9 años de prisión para el excomisario Enrique García Castaño, aunque ha sido exonerado por razones de salud. Los otros acusados que estarán junto a Villarejo en el juicio son el ex inspector jefe Constancio Riaño, quien podría recibir una pena de ocho años de prisión; el expolicía Antonio Bonilla y el abogado Rafael Redondo, socio de Villarejo en Cenyt, para quienes la Fiscalía pide una condena de cuatro años y nueve meses de cárcel en ambos casos. También se le atribuyó responsabilidad al exdirector adjunto operativo de la Policía, Eugenio Pino, quien era el número 2 de la institución. El juez Manuel García Castellón decidió excluirlo de la causa al concluir su investigación. Pino enfrentará un juicio próximamente por otra parte del caso Tándem, específicamente la número 7, conocida como el caso Kitchen, que se espera que comience el 6 de abril.
