Este miércoles, el exlíder socialista Santos Cerdán rechazó en el Senado cualquier conexión con los delitos que se investigan en el caso Koldo y afirmó que está siendo objeto de una persecución, señalando que se utilizan «conjeturas parciales transformadas en veredictos», similar a lo que ocurría «en la Inquisición». En su segunda aparición ante la comisión parlamentaria del caso Koldo, afirmó que no iba a hablar sobre «hechos específicos» de la investigación judicial, pero sí sobre «el contexto político». El ex secretario de Organización del PSOE enfrenta acusaciones en el Tribunal Supremo por indicios de delitos de organización criminal, cohecho y tráfico de influencias y ha contestado a algunas preguntas vinculadas al caso, incluyendo temas relacionados con Servinabar y otro investigado, Víctor de Aldama. El exlegislador ha sostenido su «inocencia» y ha afirmado que «no hay interés en encontrar la verdad», ni en el Senado, ni en el Congreso, ni en los medios de comunicación. Ha indicado que las acusaciones son «suposiciones incompletas transformadas en condena» para ser «destruidas en la opinión pública», describiendo esta persecución como algo «característico de la Inquisición».
Cerdán niega vinculaciones con el caso Koldo y denuncia una persecución en su contra
