Moscú/Río de Janeiro. El titular de la diplomacia rusa, Serguéi Lavrov, solicitó que se reconozcan a nivel internacional las regiones de Ucrania anexadas por Moscú, como Crimea, como un requisito para lograr una solución al conflicto. Lavrov declaró que es crucial que la comunidad internacional reconozca que Crimea, Sebastopol, Donetsk, Lugansk, Jersón y Zaporiyia pertenecen a Rusia. Lavrov enfatizó que las demás condiciones incluyen la neutralidad de Ucrania, lo que implica que el país no debe unirse a alianzas militares como la OTAN. Subrayó la necesidad de abolir las leyes que atacan «todo lo relacionado con Rusia», abarcando el idioma, la cultura, los medios de comunicación, las tradiciones y la Iglesia Ortodoxa, implementadas por Kiev desde 2014. «Todas las responsabilidades de Kiev deben ser formalmente establecidas y contar con un mecanismo de supervisión», afirmó. El ministro afirmó que siguen en la agenda «la desmilitarización y desnazificación de Ucrania, la eliminación de las sanciones, las demandas judiciales y las órdenes de captura, así como la repatriación de los activos rusos congelados en Occidente». «Buscaremos obtener garantías de seguridad para Rusia frente a las amenazas de la OTAN, la Unión Europea y algunos países miembros en nuestras fronteras del oeste», agregó.
