Casi dos años tras la victoria electoral del PP en Baleares, Marga Prohens se enfrenta como presidenta de un Gobierno en minoría a dos desafíos relacionados con el turismo: el costo de la vivienda y el descontento por la saturación turística. Se opone a la disminución, pero defiende la moderación: «No podemos continuar acumulando récords de visitantes cada año». Combatir la oferta ilegal no es una medida insignificante. El enfoque de los últimos mandatos de gobiernos de izquierda ha llevado a una situación crítica, por lo que era necesario tomar medidas. Vamos a combatir el alquiler turístico ilegal y a aumentar las multas hasta 500.000 euros. No podemos seguir registrando cifras récord de visitantes. Por eso nace el Pacto por la Sostenibilidad, ya que en Baleares no es viable seguir creciendo en número de turistas. Es fundamental priorizar la calidad y fomentar un turismo más respetuoso con el lugar que se visita. Es importante respetar las críticas, ya que vivimos en una democracia. Este es un gobierno autónomo e independiente que defiende los intereses generales que considera más importantes. Gobernar implica tomar decisiones.
