Granada (EFE).- Este viernes, Juana Rivas ha entregado a su hijo menor, de 11 años, a su padre, Francesco Arcuri, quien tiene la custodia del niño. Esta acción se realizó en cumplimiento de una orden judicial, después de un primer intento fallido que llevó a posponer el intercambio hasta hoy, el cual ya se ha llevado a cabo, según han informado fuentes judiciales a EFE. La entrega se realizó en un entorno judicial y con mayor discreción que en la primera reunión del martes, donde el alboroto mediático y los momentos de tensión llevaron a la juez de Primera Instancia 3 de Granada a posponerlo, estableciendo condiciones de privacidad y seguridad, siguiendo las recomendaciones de los especialistas que atendieron al niño. Siguiendo las instrucciones de la jueza, los padres llegaron esta mañana temprano al lugar convenido, únicamente acompañados por sus abogados. A diferencia del primer intento, donde Rivas y el menor fueron acompañados por asesores y familiares, esta vez llegaron con media hora de diferencia y en un vehículo privado que les permitió acceder directamente al garaje, con el fin de evitar una exposición. Sin embargo, esto no impidió la presencia de los medios de comunicación. Juana Rivas fue la primera en llegar al edificio de los Juzgados de Granada poco después de las nueve de la mañana, media hora antes que su expareja. Minutos después de las 11:00, Rivas se marchó en coche junto a su abogado, mientras que Arcuri salió a las 12:15 en compañía de su hijo y su abogado, escoltados por la Policía Nacional.
