Los defensores y detractores de la independencia han llegado a un consenso sobre Nueva Caledonia, informaron los representantes de este territorio de ultramar, situado a 17.000 kilómetros de París. Este acuerdo se produce un año después de una revuelta que causó al menos 8 muertes y tras décadas de tensiones, a pesar de tres referendos recientes. Los medios locales informan que se establecerá una nacionalidad caledoniana, que podrá coexistir con la nacionalidad francesa. Además, se llevará a cabo un censo para ciertas elecciones que solo incluirá a los nativos o a aquellos que han vivido en las islas durante al menos 15 años. Se anticipa que el ministro de Ultramar de Francia, Manuel Valls, proporcionará más información sobre este acuerdo, el cual debe ser ratificado por las autoridades de Nueva Caledonia y que ha estado en negociaciones durante los últimos 10 días en París.
