Madrid. Con el final de agosto, España se despide de su temporada de incendios forestales, que ha dejado cuatro víctimas mortales y ha consumido alrededor de 300.000 hectáreas en 93 incendios registrados, de los cuales 23 permanecen activos en cinco comunidades autónomas. Las estadísticas contrastan con la información proporcionada por la directora de Protección Civil, Virginia Barcones, quien ha afirmado que, después de más de 20 días de combate contra los incendios, se puede considerar concluido este episodio de incendios forestales. Por lo tanto, España deja atrás su estado de preemergencia y pasa a una fase de alerta y seguimiento. El Comité Estatal de Coordinación decidió que las condiciones han mejorado lo suficiente como para reducir el nivel de emergencia.
