La confianza de la población en el sistema de salud ha disminuido en cuatro puntos durante el tercer trimestre del año y ahora solo el 48,5 % opina que está funcionando adecuadamente. La tercera edición del Barómetro Sanitario del Ministerio de Sanidad, publicada por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), revela que los ciudadanos muestran preferencia por los servicios públicos en todos los sectores de atención, mientras que se observa un descenso en la inclinación hacia los servicios privados, especialmente en la atención especializada, que ha disminuido del 43,3 % al 39,2 %. La encuesta revela que la sanidad pública es la opción preferida, incluso con la posibilidad de contar con un seguro privado: del 31 % de las personas aseguradas, dos tercios la eligen en caso de enfrentar una enfermedad grave, lo que representa un aumento de cuatro puntos respecto a la encuesta anterior. La inclinación hacia los servicios públicos se observa en todas las áreas y a diferencia de lo que ocurre en los centros privados, las cifras han aumentado en comparación con el trimestre anterior: la Atención Primaria ha subido del 67,6 % al 68,8 %; la atención especializada ha pasado del 54,2 % al 58,2 %; los ingresos hospitalarios han crecido del 72,9 % al 73,4 %; y las urgencias se mantienen en un 70 %. Sin embargo, la proporción de personas que opinan que el sistema público opera de manera adecuada disminuye del 52,5 % en julio al 48,5 %. En comparación con la tercera oleada de 2024, la disminución alcanza los seis puntos. Además, las calificaciones que los ciudadanos dan a los diferentes servicios también muestran una disminución: un 6,17 para Primaria; un 5,59 para el servicio especializado; y las urgencias 061/112, que suben de 7,17 a 7,26.
