El Gobierno reconoce que la comparecencia del miércoles del jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, ante el pleno del Congreso es crucial, ya que se presentarán medidas contra la corrupción en respuesta a la situación generada por Santos Cerdán. Confían en poder mantener el apoyo de sus aliados. Sánchez se presenta en la Cámara de Diputados para realizar dos comparecencias: una por la mañana para exponer las medidas y otra por la tarde para informar sobre las cumbres internacionales en las que ha participado. La reunión se produce en un contexto de presiones por parte de los aliados parlamentarios del PSOE y de su socio Sumar, quienes piden que se implementen medidas tras el caso Koldo y la crisis que atraviesa el PSOE, ya que consideran que las acciones tomadas han sido inadecuadas. La representante del Gobierno, Pilar Alegría, ha asegurado que se implementará un conjunto de medidas y que se incorporarán muchas de las propuestas presentadas por otros grupos, incluyendo Sumar. Fuentes gubernamentales indican que se incrementarán las sanciones por delitos relacionados con la corrupción y se reforzarán las garantías para evitar que las empresas corruptas puedan volver a trabajar con la administración pública.
