Madrid. Esta mañana se reanuda el XXI Congreso Nacional del Partido Popular, que comienza en medio de la controversia por el caso del socialista Francisco Salazar, acusado de acoso sexual. Esta situación surge tras su nominación por Pedro Sánchez para el cargo de adjunto a la Secretaría de Organización del PSOE y es un tema de conversación entre los asistentes. Las críticas hacia Sánchez y el socialismo, así como las comparaciones sobre los problemas que enfrenta el PSOE, que este sábado llevará a cabo un Comité Federal para intentar reorientar el partido tras la crisis interna provocada por el caso, han surgido con la llegada de los delegados. Ester Muñoz, la portavoz del grupo popular en el Congreso, declaró al llegar al Ifema de Madrid, donde comenzó el congreso del PP que este sábado reeligirá a Alberto Núñez Feijóo como presidente del partido y aprobará sus propuestas políticas y estatutarias. Los miembros del partido popular están de acuerdo en que los socialistas no obtendrán beneficios al realizar cambios en su dirección y que la única manera de resolver sus problemas es con la renuncia de su líder, Pedro Sánchez. Además de las declaraciones oficiales, el asunto de Salazar es el tema principal de conversación entre los participantes del congreso, que el PP describe como un contraste con la corrupción que afecta al PSOE.
